Si tienen razón, cambie un poco el escenario. Sin embargo desde el punto de vista de la pedagogía del pensamiento crítico y creativo pienso que este pude ser un caso potencial. Ustedes me dirán.
Este podría ser un caso para analizarse en una reunión de profesores … en las que se evalúan los logros y desaciertos del periodo concluido.
Los involucrados son el educador a cargo del curso y los estudiantes, en su mayoría estudiantes de Odontología.
Se presentan dos situaciones.
La primera, un grupo de estudiantes que piensan que “no son buenos para escribir” y la segunda otro grupo que creen ser muy buenos y que podrían aprovechar su mejor tiempo en cursos relacionados con sus respectivas carreras.
El docente constantemente motiva a sus estudiantes, los anima a experimentar y a retarse a sí mismos. Además, desde el principio les ha expresado su confianza en lo que ellos pueden lograr sí se lo proponen y se comprometen con el trabajo a realizar durante todo el periodo.
Muchos, ha logrado un gran avance y lo han notado, esto les motiva a seguir trabajando duro. Pero, por otro lado, otros, a pesar de que su trabajo es bueno, no logran conectarse con la materia y la siguen considerando inútil.
Puntos a valorar:
1. El programa del curso llena las expectativas de los alumnos.
2. El curso va acorde a las habilidades de los alumnos.
3. Experiencias de los estudiantes en los cursos anteriores.
4. Actitud de los estudiantes
5. Nivel de compromiso e interés de los estudiantes.
6. Papel de profesor como motivador y facilitador.
7. Metodología utilizada por el profesor.
8. Otros